Ayer me hicieron una entrevista en una emisora a nivel
nacional. Me habían llamado. Normalmente te llaman a una hora, pero siempre puede retrasarse por algunos
motivos. Es normal. Hasta ahí lo entiendo. Pero ha sido la primera vez que se
me ha pasado por la cabeza levantarme y largarme. Pero, en fin, hay que tratar de ser lo más
educado posible y capear el temporal como mejor puedas y ahí aguantamos los
temas de fútbol y fútbol. Hace poco leí un artículo que refleja mi pensamiento.
Más o menos decía así (con algunos toques personales):
“…No
me gusta el fútbol. Me siento obligado a aclararlo. De hecho, mi sentimiento va
más allá de no gustarme: me desagrada profundamente el fútbol y todo lo que se
le asocia. No entiendo un deporte en el que unos tipos que corren, se empujan,
se tiran al suelo fingiendo dolores de parto, escupen y se dirigen al árbitro
con insultos que acompañan de tocamientos genitales en la propia entrepierna.
Es algo terrible esto
que me pasa, ya que vivo en un mundo en el que no puedo escapar de él. Por más
que me esfuerce por ignorarlo, siempre se cuela algún conocimiento
indeseado. Sin embargo, yo soy incapaz de contagiar mis pasiones a
nadie. Por mucho que me apasionen las montañas, las ultras o los libros de
Chomsky, la inmensa mayoría de la gente
vive tan feliz sin saber qué coño es todo esto. Mientras, yo estoy condenado a
saber quién es Gerard Piqué, quién es su novia y quién es el Cholo Simeone.
Para ignorar toda esa información no deseada tendría que vivir en una cueva,
sin comunicaciones ni tratos con los humanos, cazando jabalíes con lanza y
recolectando frutos. Los fans de Piqué, su novia y el Cholo Simeone, en cambio,
no tienen que filtrar información sobre mis gustos e intereses, porque esa
información, sencillamente, no les llega por ningún medio.
Preferiría
no enterarme de nada, pero, como me entero, a veces elaboro juicios, como los
elaboro sobre lo que me gusta. Tampoco puedo apagar el cerebro…”
La verdad es que si me
llegan a preguntar sobre la selección y el próximo mundial, probablemente les
hubiese cambiado el color de la cara (o igual me hubiesen echado y así no
tendría que irme yo). En mi época de estudiante de Educación Física tuve buenos
profesores, pero tuve uno que causó cierta admiración por su forma de ver el
deporte (siempre hay profesores “raros” en todas las universidades). Veréis, me
importa un carajo que la selección gane o no el mundial, como si no llega a
clasificarse, me dejaría en la más absoluta indiferencia (para qué engañarnos,
en el fondo creo que me alegraría un poquito). Pero es que esto lo puedo aplicar
a casi todos los deportes. Debo ser un espécimen muy raro porque me importa
otro carajo que Nadal, Alonso, Gasol, etc, etc ganen o pierdan. Sí que es
cierto que tengo una pequeña excepción, que son mis amigos. Ahí sí que me alegraría
verlos triunfar (porque son mis amigos y los conozco), pero es que para mí una
persona de Cuenca (con todos mis respetos, tengo algunos amigos allí) que no
conozca, vale lo mismo que una persona de la república de Malgache. Y si el
deportista de la república de Malgache ha corrido mejor y ha ganado al de
Cuenca, pues me parece igual de bien que si hubiera ocurrido al revés. Vamos,
que si me preguntan a la salida quién preferiría que ganase, pues eso, me la
trae al pairo.
En fin, que estuve en
una entrevista en la que prácticamente no me enteré de nada, porque desconocía
el noventa por ciento de lo que estaban hablando. Generalmente, cuando te
llaman para algo así, suelen tener alguna información sobre el tema. Pues no.
Claro que así fue la cosa. Sabiendo que eres corredor de ultras,…No es el
diálogo original, pero algo parecido:
-....
- -
¿Corres 10 km?
- -
No, distancias
más largas…normalmente me gusta correr ultras
- -
Ah, ¿has corrido
maratones?
- -
Bueno, sí, pero las
ultras son carreras superiores a esa distancia
- -
….
- -
Ultimamente hay
una moda por correr y no es bueno, hay gente que muere de muerte súbita
-
-Sí claro que hay
(aquí no dije lo que pienso, un fallo. Y probablemente más en el fútbol, y en
el sofá,..)
Te
cortan porque no sé quien entra en antena (pero vuelve a ser sobre fútbol)…y tú
allí sentado en la silla como un gilipollas, madre; y tú como un
gilipo..o..o..ollas!!!!
Jaja... Salva, yo pensaba que esa situación te había pasado en más de una ocasión y que ya no le dabas mucha importancia. Normalmente te usan de relleno, como si fueras una guarnición que solo está en el plato para contrastar visualmente con el gran chuletón... y te interrumpen... o te dejan a medias cuando faltan dos segundos para las horarias y los informativos. No tienen ni idea de lo que significa "documentarse" porque el oyente tampoco tiene ni puta idea del tema. A menos de que se trate de un programa especializado, el oyente solo quiere que le hablen de eso... con el resto se empacha en dos minutos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por cierto, la cita cojonuda porque se puede aplicar también al mundo de la política en general.
ResponderEliminarAl final no somos tan pocos los que "odiamos" el fútbol. No te sientas un bicho raro. Somos muchos bichos raros. Un abrazo
ResponderEliminarComo siempre das en el clavo. Yo soy de los que prefiero que pierdan pronto para que no nos atosiguen durante todo el mundial.
ResponderEliminarSalud y montaña.
Salva, viviendo y aprendiendo....Un abrazo Luis Angel
ResponderEliminarAlguien se imaginaría por ejemplo a Miguel Heras escupiendo a la cara de Timothy Olson, fingiendo lesiones para que se pare la carrera y les atiendan y luego siguen corriendo como si nada o insultando a los espectadores en Zegama. Pues todo eso es lo "típico" del fútbol, pero claro, el fútbol es así, ese es el ejemplo de unos profesionales a los pequeños y estos a su vez lo hacen igual. No se merecen ni el agua que se beben.
ResponderEliminarEstoy totalmente contigo Salva
Jajajajajajaajja..................y para colmo va España y casca de 5.
ResponderEliminar