TU100
No recuerdo como me enteré de
esta carrera, pero cuando vi el lugar y el perfil de la carrera me llamó la
atención y…no me defraudó en absoluto.
La provincia (y la ciudad) de
Chiang Mai está al noroeste de Tailandia. Se puede llegar a Chiang
Mai en avión, tren o autobús. Yo fui en avión y tarda poquito más de una
hora. A partir de aquí hay 182 kms por carreteras de montaña muy reviradas y
torcidas y te lleva alrededor de 4 a 5 horas llegar a Ban Tham.
La carrera se celebra en el
increíble Cave Lodge en el pueblo de Ban
Tham. Ban Tham está a 8 km al norte de Pang Ma Pha (Soppong) en la
carretera principal de Chiang Mai a Mae Hong Son, y a pocos kilómetros de la
frontera con Birmania.
Debido al “mal tiempo” que hubo (aquí
cuando llueve, es como el diluvio, al final tuvieron que recortar la carrera
debido al difícil acceso que suponía llegar a algunos lugares, especialmente
por la noche. La carrera era en principio de 100 km, dos vueltas a un circuito
de 50 km. Se dejó la primera vuelta original y se hizo un bucle de 12 km al que
había que darle dos vueltas, lo que hizo que al final fuesen 74 km, pero, eso
sí, con 3.900 m positivos, 35 grados de temperatura y casi un 100 por 100 de
humedad.
La carrera se puede dividir en cuatro
secciones.
1) Desde el principio, la carrera
pasa a través de la aldea tribal de Ban Tham, y desciende hasta el encantador
río Nam Lang. Se pasa por la impresionante entrada de Tham Lod (Lod Cave)
justo antes de la primera subida, por una bonita senda y un espeso bosque. Aquí
salieron un inglés y americano bastante rápido y, de repente, veo a una chica
que me pasa como una moto. Joderrrr, pues sí que vamos bien.
Aproximadamente, al km 2, la carrera
sube abruptamente cuesta arriba, a través de bosques de teca algo más de un
kilómetro. Y me caliento, no debería, porque la temperatura ya es alta, aunque
sean las 6 de la mañana. Algunas secciones de esta pista son muy rocosas. Y les
pongo en fila. Desde aquí, se sigue la cresta por un bonito sendero, antes de
descender por otra senda a pie de la pintoresca aldea tribal Karen de Muang Paem. Justo antes de llegar
al pueblo se cruza un arroyo.
Aquí está el primer control (y el 5º y 7º,
pues se repetirá esta parte en el bucle) aproximadamente sobre el km 6,5. Aquí
llegamos juntos el japonés Koji y el inglés Harry. Pero parten como un rayo y
no les puedo seguir. Coño, vaya ritmo para llevar sólo 6 km!!!!!!!!!!!!!, con
lo que queda y el jodido calor que hace.
2) La carrera deja Muang Paem y sigue un
camino a través de un hermoso bosque, con toboganes, algunos bastante fuertes,
para a continuación, y a lo largo de un pequeño camino de tierra, subiendo de
manera constante y luego bajando al valle se cruza el arroyo por un puente de
madera rústica. En este tramo, se hace un desvío de aproximadamente 2,5 km (que
luego hay que deshacer) para llegar a la pequeña y remota aldea tribal Lahu de Eyla (16,5 kilometros
aprox). Aquí se encuentra el segundo control (CP 2). A esta altura el
japonés me llevaba casi 10 minutos y el inglés cinco. Lo curioso de este
control, aparte de la gente tan encantadora, es que en el avituallamiento
tenían repelente, porque a partir de aquí nos íbamos a encontrar con una zona
de alto riesgo de malaria y dengue (lo cierto es que vas tan metido en la
carrera que ni me acordé de los mosquitos…ni del repelente). Aquí también nos encontraríamos
con otro problema. El siguiente control se encontraba a unos 21 kilómetros por
lo que había que gestionar muy bien el agua y era la parte más dura de la
carrera, pues teníamos que subir al punto más alto del recorrido.
3) Desde Eyla, como dije antes, la carrera retrocede de nuevo durante 2 1/2 km y luego sigue un sendero muy poco usado
a través de la selva profunda en la parte noroeste del país. Este sendero
sube ganando constantemente altura, aproximadamente 650 m en 6 km. Al
final de este camino, (que es el punto más alto de la carrera a 1441m (en este
punto, al final dieron botellas de agua), y también es el punto de la mitad de
la carrera) giramos a la izquierda por una pista vieja en un largo descenso,
ondulante (15 km aprox.). Y de pronto veo al inglés. Sorpresa agradable. Vaya,
parece que se lanzó demasiado o ha visto que el ritmo era alto (eso es lo que
pensé, vete tu a saber cual fue la razón). En este tramo la selva está
reclamando rápidamente este camino. En los tramos por donde corre el agua,
cuando llueve, la lluvia ha formado barrancos de 6 m de profundidad y 5 metros
de ancho, donde solía estar antes el camino, dejando pistas sólo alrededor de
un metro de ancho. En los tramos donde la pista está bien, el inglés corre
como un gamo, pero en cuanto empiezan las subidas y sobre todo las bajadas, ahí
ya le cazo. Y así seguimos.. Esta es la parte más remota de la carrera, y
donde se puede escuchar a los gibones y los ciervos. Este camino nos lleva
hasta la aldea tribal Lahu de E-Ko (CP 3), que está situada en el río Nam Lang
(aprox. 37,5 kilometros)
4) Desde E-Ko, la ruta sale del pueblo por
un pequeño camino de tierra, antes de girar a la izquierda por un sendero que
sigue la cresta y que desciende gradualmente hacia Ban Tham. Aquí me voy
del inglés en una bajada. Esta sección de la carrera es bastante
resbaladiza y técnica en partes con algunas bajadas pronunciadas. En la última
bajada, corta, pero bastante durilla me parece ver a alguien corriendo delante
(es selva y es difícil ver más de 25 metros, salvo en alguna pequeña recta).
Sigo por la senda y de pronto,…el japonés. Muy jodido tenía que ir para que le
bajara más de diez minutos en tan poco tiempo. Pero no te puedes fiar de nada. Los
3,5 kilometros finales son llanos y fáciles, con 1,5 km de carretera de
hormigón y los últimos 800 metros muy bonitos, por senda y cruzando un arroyo
para llegar a Cave Lod (Ban Tham), cuarto control (CP4), km 50 y final del
círculo. En la subida al control me dan un trallazo los gemelos, pero un dolor
jodido (en la Cabra Trail en Canarias, el fin de semana anterior ya me dijo el
fisio que los tenía como piedras, pero como nunca había tenido problemas ahí,
tampoco le di más importancia; ahora parece ser que si la tenía). No sé que
narices va a pasar, pero no pintaba nada bueno. Los calambres eran muy
duros. Ahora había que dar dos vueltas
de 12 km. Siguiendo la misma ruta que al principio hasta el CP 1, pero en este
punto se giraba a la izquierda para hacer el bucle.
Salgo del control y el japonés me
sigue. En ese momento llega el inglés al control. Voy a ritmo, pero no puedo
forzar porque los gemelos se me van a romper. Estoy deseando que llegue la
subida. Y aunque me dan algún trallazo de vez en cuando no voy mal. El japonés
se queda. Parece fundido. En la bajada
tampoco puedo forzar mucho, especialmente al principio, hasta que las piernas
se hacen al cambio de desnivel. Llego al CP 1 (que en este caso sería el CP 5)
en solitario. Sudo como un pato.
Desde aquí, después de una pequeña bajada, hay
tres kilómetros de subida por una pista que parece asfaltada, pero en muy mal
estado. El desnivel es bastante fuerte y no puedo correr. Cuando llego a arriba
y me pongo a bajar, los gemelos casi me llegan al cuello. Me tiro al suelo para
que no se me suban y trato de estirarlos. Bajo poco a poco, haciendo zetas en
la pista hasta que se suaviza algo y puedo correr. Y llego de nuevo al CP 1,
(ahora CP 6). Me pongo una crema en los gemelos a ver si me suavizan algo el
dolor. En la segunda vuelta en la senda troto y me pongo a subir a buen ritmo
la fuerte subida, para intentar ganar tiempo, que se que voy a perder bajando.
Pero ahora sudo como dos patos. El calor y la humedad son horribles. Parece que
con el sudor de un sólo brazo puedo llenar un vaso. Cruzar el río es un alivio,
porque así me refresco. Y vuelvo a llegar al CP2 (ahora CP 7). Quiero subir,
porque es dónde no me duelen apenas los gemelos y puedo poner un ritmo alto.
Pero me da pavor llegar a arriba y pensar en la primera parte de esa bajada tan
pendiente. Esta vez voy precavido. Y en vez de correr, ando y troto de
espaldas, hasta que la musculatura se haga de nuevo a la bajada. Pero tampoco
puedo ir muy rápido, todo lo contrario, de vez en cuando me da alguna sacudida
que me hace parar. Pero ya sólo me quedan tres kilómetros y ya lo veo más
factible. Y cuando sólo te queda uno, parece que se aguanta más el dolor y por
fin llega la meta. Al final casi diez horas de agonía.
Salvador Calvo Redondo 9:51:17 España
Harry Jones 10:10:12 England
Randy Travis 10:26:14 U.S.A.
Koji Beppu 10:46:54 Japan
Tarmo Vannas 10:58:11 Finland
Clare Gallagher 12:24:12 U.S.A. primera chica y 6ª de la
general.
Me gustó muchísimo la carrera. Un recorrido muy guapo, espectacular, en
un lugar de ensueño, sobre todo el lugar, una pasada. Si podéis os lo
recomiendo, porque vais a flipar.
Yo me alojé en Cave Lodge, que es donde empieza y termina la carrera.
Vaya sitio!!! Todo de madera, con habitaciones en varios formatos, desde
literas para cuatro personas, hasta pequeñitas cabañas unidas por puentes de
madera para parejas. Y barato, muy barato. La habitación con cuatro literas te
sale por tres euros. Y la comida más de lo mismo. Puedes comer bien hasta por
poco más de un euro,…(yo estuve allí 6 días y no pagué mas de cien euros, sin
privarme de nada). Eso sí, no esperéis ningún lujo. De hecho, llevad toalla,
jabón,…pero es que merece la pena.
Pero lo mejor de todo es la cantidad de actividades que puedes hacer por
allí. Yo iba con una idea, pero acabé tan cascado de gemelos, que me hizo
cambiar el plan. Además, intentar cruzar a Myanmar por aquella zona, era
imposible. Alto riesgo por ser el famoso triángulo del opio. Pero bueno hice
otras cosas. Bajé en kayak el río que está justo debajo de Cave Lodge, muy
entretenido. Puedes hacer descensos de varios niveles y de varios días. Quizás
lo más atrayente del lugar sean las cuevas.
Esto está lleno de “agujeros”. La
cueva principal tienes que hacerla con guía y un río la atraviesa por dentro
(este río fue el que bajé yo en kayak, una pasada porque tienes que llevar
frontal en el descenso). Pero hay otras muchas que no es necesario. Yo hice un
par de ellas, con cuidado pero no tienen mucho peligro. En algunas todavía se
pueden ver las tumbas donde enterraban a los antepasados, algunas con más de
tres mil años de antigüedad.
También hice varias rutas en solitario. Solamente una me hizo desistir y
no fue precisamente porque estuviera cansado. Sino porque hubo “alguien” que se
empeñó en que no siguiera. La madre que la parió, que grande era. Y eso que
estaba advertido. Pero cuando te aparece un pedazo de serpiente en el puto
medio, pues como que te acojonas un poco. A pesar que me habían dicho que se
asustaban y se iban. ¡Ya! Pues esta no se asustó tanto y el que lo hizo fui yo,
así que media vuelta que aún hay muchas cosas que hacer.
Otra cosa muy interesante es alquilar una moto o una bici. También es muy
barato y te llevan a cualquier sitio. Aquí, las motos, las utilizan por las
sendas más inverosímiles y escabrosas sin ningún problema.
Después de seis días aquí me fui a Chiang Mai. Mi intención ahora era
visitar el parque nacional de Doi Inthanon, donde se encuentra el pico más alto
del país (2.565m).
La verdad es que no me gustó tanto. Resulta que al pico se sube en
carretera. Así que no os esperéis algo salvaje y difícil JJ, todo lo contrario,
muy turístico. Si que es cierto que tiene rutas guapas y unas cascadas
espectaculares,
pero nada comparado como el norte, donde estuve anteriormente.
Esto está ya más preparado para el turismo. Pero bueno, también está bien
conocerlo.
Y aquí se acaba mi viaje por estas tierras. Y como también viene siendo
habitual últimamente en mis viajes, algo tiene que ocurrir con mis vuelos. Y
esta vez no iba a ser menos. Tenía vuelo de Chiang Mai a Bangkok. De aquí a
Dubai y luego a Madrid. Pues el vuelo de Bangkok a Dubai se retrasó. Tenía que
coger el vuelo a las 15:15 y eran las 14:40 y estaba aterrizando. El embarque
lo cierran 20 minutos antes. Salir del avión, pasar los controles policiales y
llegar a la puerta de embarque en diez minutos, vamos ni Tom Cruise en Misión
Imposible 4. Pero estas compañías asiáticas son diferentes, por eso me gusta
volar con ellas. Salir del avión y una señorita preguntando: ¿Mr Calvo?, Yes,
I’m. Oh, please, follow me!!!, si hija si, yo te follow y lo que haga falta. Y
así pude llegar a tiempo, followando a la señorita. Así da gusto viajar.
Enhorabuena por el triunfo
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