THE LAST SECRET (BHUTAN)
2-7/JUNIO/2013
30 MAYO:
12:10H Cojo el avión en Madrid. Afortunadamente consigo
facturar la mochila hasta Paro (Bhutan), a pesar de que el vuelo desde Delhi a
Paro es independiente. Llego a Munich y me reúno con Manu y David y volamos
juntos (20:00h) hasta Delhi.
31 MAYO
11:45H. Salida de Delhi. Aunque sacamos visado para la
India, en realidad no nos hizo falta (si el transfer no es superior a 12
horas), pero nadie fue capaz de darnos información de si hacía falta o no, por
lo que no nos arriesgamos a quedarnos en la India, pues Druk Air, la compañía
butanesa, es con la única que se puede volar a Bhutan y no tiene convenio con
el resto de compañías. Eso sí, en el aeropuerto de Delhi hay que tener
paciencia, pues la información no es precisamente clara y concisa. Al ir a
embarcar nos damos cuenta que el avión que nos lleva a Paro hace escala en
Katmandú (esto no te lo había dicho, pero bueno, tampoco nos importa mucho).
Llegamos a Katmandú a las 14:30 y nos informan que el aeropuerto de Paro está
cerrado por mal tiempo y no nos dejan salir del avión porque hay que hacer
mucho papeleo si bajamos a Katmandú. En
el avión nos enteramos que los que iban a viajar ayer a Paro tampoco han salido
y éstos si que tuvieron que alojarse en Katmandú. A los 45 minutos nos informan
que es posible que unas horas haya una mejora de la meteo y podamos volar y
después de unas 4 horas en el avión conseguimos despegar. Las vistas desde el avión son espectaculares. Tenemos el Everest a un salto.
Cuando estamos
aterrizando comprendemos por qué es difícil llegar aquí. El avión entra entre
dos montañas, hay niebla y está lloviendo y además casi tocamos con las manos
las laderas de la montaña (exagerando un poco, pero es para que os lo
imaginéis).
Llegamos a Paro a las 19:30. Nos recogen en bus y nos trasladan a
Thimbhu, capital del país, donde cenamos y hacemos el control médico y el de
material.
1 JUNIO
6:00 Desayuno. Aquí amanece a las 5 de la mañana y el sol se
pone a las 19:00. Luego nos trasladamos
en bus a Punakha (antigua capital del país). Hacemos varias paradas turísticas
(con visitas curiosas, como el Phallus Museum, si, si eso que os imagináis, que
aquí es un símbolo nacional….lo tienen dibujado en la fachada de muchas casas, …a
ver si copiamos!!!)
y otra parada para comer, llegando a Punakha sobre las
13:30 ( el viaje sin paradas es de unas 3 horas, pero es que aquí las carreteras
son…diferentes (olvidaos de autovías, autopistas, nacionales y demás, esto es
una mezcla de carretera secundaria con caminos de monte). Acampamos a las
afueras de la ciudad en tiendas por parejas (yo con David) y preparamos la
mochila y la estrategia para mañana.
2 JUNIO: 1ª ETAPA: PUNAKHA
(1209m)- CHORTEN NYINGO (1756m), 30,7km (+1263, -729)
6:00h Desayuno. Traslado en bus durante 10 minutos hasta la
salida en un monasterio de la ciudad. Nos recibe, no sé como se llama, pero es
algo así como el gobernador de la ciudad, y un colegio entero de secundaria,
que nos cantan el himno del país y algunos alumnos nos acompañarán los 100
primeros metros de la salida.
Salida a las 8:15h. Bastante calor en la salida.
Los cinco primeros kilómetros son llanos y por asfalto. Cada vez se nota más el
calor. Cruzamos un río y subimos por la otra orilla, que sigue siendo llano y
también con asfalto aunque por las orillas se puede evitar. Por fin se acaba el
asfalto y empieza una mezcla de pista y senda y tras cruzar un puente llego al
primer control, seguido del neozelandés Jo. Ahora hay tramos de senda. El
recorrido se hace un poco más entretenido con repechos fuertes. Se pasa por
campos de arroz para cruzar luego otro puente tibetano donde está el segundo
control.
Aquí hay una subida muy fuerte de unos 500 metros, por asfalto que se
deja enseguida para correr por una pista de tierra con toboganes durante unos
cinco kilómetros. Se coge un desvío a la izquierda y comienza la subida más
dura y larga de la etapa ya que son otros cinco kilómetros en continua subida,
con algunos repechos fuertes que unido al calor que hace, te lo pone más duro
de lo esperado. Al final creo que no fueron 5, sino 7 km de subida. Tras 2h y
57 minutos llego a meta. La meta está en un lugar impresionante, el templo de
Chorten Nyingo y los monjes nos reciben tocando esa trompeta típica del país.
Aquí el tiempo está nublado, a veces llueve, pero la temperatura es muy
agradable. Por la noche los monjes (por primera vez en la historia) nos ofrecen
un repertorio de oraciones tocando los instrumentos típicos del país (a ver si
busco los nombres, porque no son fáciles…), pero fue un espectáculo
maravilloso. La comida y la cena es simple y básica, pero bastante buena (sopa,
arroz, verdura, noodles, huevos revueltos,…). Dormimos en tiendas.
3 JUNIO: 2ª ETAPA: CHORTEN
NYINGO(1756m)-KABISA -GRANJA(2495m): 28,7km (+2384,-1649)
7:00h Salida del templo. Enseguida nos metemos en una senda
con mucha vegetación y bastante técnica, con agua y barro. Voy seguido de Manu.
La senda es una preciosidad, ya sabéis, piedras, muchas piedras, agua, mucha
agua, barro, mucho barro,…al llevar, más o menos cinco kilómetros veo que va
delante un corredor ¿????, coño, de dónde ha salido? Es Jo el neozelandés, pero
poco después veo a David, a Gus y Stephan,…y éstos por dónde narices han venido
si Manu y yo hemos seguido perfectamente las marcas? Al parecer los guías
locales que iban con los voluntarios al primer control, la remarcar más el
recorrido, pues era conflictivo, marcaron un atajo, por lo que hubo esa
confusión. Nada, hay que seguir. Además hoy estoy disfrutando como un enano con
el recorrido. La senda empieza a subir con mucha agua y barro. Tiene repechos
muy duros y así llego al primer control. A partir de aquí comienza una subida
durísima por senda alucinante. Me parece increíble que haya algo así por aquí.
La organización nos advirtió que se nos iban a pegar sanguijuelas por el cuerpo
y así fue. Además esta etapa era complicada por otro motivo. Una vez que salías
no había opciones hasta la meta, ya que no había ningún acceso, así que o vas
para adelante o vas para atrás. Después de esta dura y larga subida llego al
segundo control, en un chorten donde está Emma (la francesa responsable de
comunicación) y comienza una bajada de esas con las que puedes alcanzar un
orgasmo!!!. Cinco kilómetros bajando por una senda y teniendo que ir “bailando”
continuamente con los pies. Unos cinco kilómetros después acaba la senda y
comienza una pista y aquí viene mi primer susto que me hace estremecer. Un
fuerte dolor aparece en mi tibia izquierda y mi memoria me hace retroceder a unos meses atrás donde
me ocurrió algo similar, pues los síntomas son idénticos: una periostitis. Y
además bajando. En fin, consigo llegar a meta, pero bastante preocupado. Cuando la organización pone el road book que
la meta es una granja, pues yo me imagino eso: una granja. Pues no. Aquí el
concepto de granja debe ser un poco diferente. Se trata de un “edificio” de
tres plantas, en construcción.
Nosotros dormimos todos juntos en la del medio.
El suelo es de tierra con una especie de hojas como las de pino por encima. Una
de las cocineras es muy maja y simpática!!! El cabrón de Stephan me la quiere
endosar…
4 JUNIO: 3ª ETAPA:
KABISA-GRANJA(2495m)-PHAJODING MONASTERY(3605m):28,3km. (+1952, -837)
7:00h. salimos de Kabisa. Normalmente el desayuno lo tenemos preparado a las 5:30 y
tenemos que dejar libre la tienda (cuando dormimos en tienda) y la mochila que
nos transportan, a las 6:15h. La primera parte de esta etapa transcurre, al
principio por una pista y enseguida a una carretera con bastantes toboganes.
Hoy decido meter en el camel el chubasquero y una camiseta térmica porque no sé
si me pierna me dejará correr y tendré que ir andando. También me hago un
taping en la pierna (como me enseñó Elorrieta-Grupo Fisioclínicas de León) a
ver si me arregla algo o al menos me suaviza el dolor. Así que salgo con
tranquilidad, pero voy aguantando el dolor. Para más narices, encima la etapa
es por carretera en su primera parte. Aún así llego al primer control con Jo
Petersen. Continuamos por la carretera hasta llegar a un pueblo donde por fin
abandonamos el asfalto y empezamos una durísima subida por una senda que
atraviesa un monasterio hasta llegar al segundo control. Aquí me dicen que sólo
quedan 6 o 7 kilómetros a meta, de los cuales el siguiente kilómetro y medio es
prácticamente llano por una bonita senda con vistas a la ciudad de Thimbhu. Al
finalizar la senda se gira a la derecha y atravesamos miles de banderas de
oración, pero también empieza la subida al punto más alto donde dormimos. La
subida transcurre por una senda en medio de un inmenso bosque. Se me empieza a hacer eterna. Además se ve
muy poco pues está cerrado de niebla. Cuando parece que llego, ya que se
suaviza, empieza a llover y otra sorpresa. Hay que seguir subiendo más, pero
mucho más y sin parar de llover. Por fin aparece el monasterio. Llego calado.
No hace mucho frío, pero después del esfuerzo te quedas pajarín.
Además estamos
a 3.600 metros de altura. Menos mal que acerté a meter ropa en el camel, pues
mi mochila con la ropa tardó en llegar 6 horas. También es digno de mencionar y
de agradecer el trato que nos dieron los monjes. Nos dejaron una habitación, la
única que tenía un pequeño radiador para que entrásemos en calor. En este
monasterio el Lama recoge niños abandonados. David les había llevado una
equipación de fútbol y yo algunas cosillas más. Así que el director de carrera
nos comentó que teníamos que jugar un partido contra los monjes bajo
penalización de tres horasJJJ.
Menos mal que dejó de llover. Al final jugamos el partido. A ver si os muestro
alguna foto del campo de fútbol, porque merece la pena…El lama hizo de árbitro
y nos pudimos reír un montón. Eso sí, yo jugué de portero
y los monjes no
tuvieron compasión y alguno me dejó alguna marca. Pero nos dejaron dormir en
sus habitaciones. Son muy sencillas y básicas. Un tablón de madera y con suerte
una alfombra. Nada de armarios, así que no quiero imaginar donde pudieron
dormir ellos esa noche.
La tibia me ha dolido, pero no tanto como yo esperaba, eso
me alivia un poco, pues yo sé que si fuera una periostitis severa el dolor
hubiera sido insufrible, sobre todo bajando, pero tampoco estoy para lanzar las campanas al
vuelo, esto puede empeorar cualquier día, así que lo tomaré con precaución.
Además el fin de semana anterior, en un training camp, había comentado que todo
lo terminado en –itis no era motivo para retirarse, así que me lo tendré que
comer con patatas!!!
5 JUNIO: 4ªETAPA: PHAJODING
MONASTERY(3605m)-PARO-GRANJA(2280m):37km (+1659, -2998m)
7:00h. Salida de la cuarta etapa. Los monjes ya nos habían
despertado con sus campanas y oraciones un par de horas antes. El día amanece
muy nublado y con una ligera lluvia, pero la temperatura es muy agradable para
correr. Nos da la salida el Lama. La
salida es hacia arriba por una senda. Aún tenemos que seguir subiendo hasta la
cota más alta de la prueba, cerca de los 4.000 metros. Manu tira fuerte y le
seguimos Randall (el americano afincado en Bhutan y que además habla español) y
yo. Es una preciosa senda de montaña. Llegamos al punto más alto y comienza la
bajada. Vaya bajada. Más de 1.500m de desnivel en cinco kilómetros. Si en la
bajada de la segunda etapa tuve un orgasmo, aquí tuve dosJJJ.
Esa bajada que nos gusta a los montañeros. Retorcida, técnica, con piedras,
agua, barro, hojas y además el terreno húmedo debido a la lluvia y a la niebla,
que más se puede pedir,… pues llegando abajo, todavía nos queda “correr” por el
cauce pedregoso de un río. Así hasta que llegamos a una pista que nos conduce
al primer control.
Aquí giramos bruscamente a la derecha y comienza una subida
por una senda que luego sigue el curso de un río. Lo cruzamos y seguimos
subiendo campo a través casi sin senda (bueno, sin el casi) hasta llegar a una
pista. La pista es casi llana, durante algo más de un kilómetro. Vas corriendo
y de repente te fijas en una pintura en el suelo que te indica giro a la
derecha, donde comienza una durísima subida por una senda. Al girar, enseguida
mi mente piensa que ese desvío es “peligroso”, porque como no vayas atento no
lo puedes ver y puedes continuar por la pista, que es lo más lógico. La subida
es larga, unos 8 km, pero antes de llegar arriba está el segundo control. Aquí
se encuentra el alemán Daniel, que me pregunta si el marcaje está bien. Le
respondo que sí, pero que hay que ir con atención. Y me confirma lo que pasó
por mi imaginación cuando cogí el desvío. Manu, Stephan, David y Gus, se
perdieron. No vieron el desvío y siguieron por la pista. La verdad es que para
darles unas collejas, porque la carrera está muy bien marcada y hay marcas casi
cada 20 metros o incluso menos, así que si en cien metros no ves una marca….da
la vuelta. Ellos mismos reconocieron que fue un despiste suyo. Tampoco perdieron
mucho tiempo, pues llegaron de nuevo al primer control y estaba muy cerca (unos
10 minutos). La verdad es que esa información hizo que me relajara un poco
(sólo un poco, que al final casi nunca es nada, qué narices, eso de relax no existe en competición). Bueno, sigo subiendo por esa
senda boscosa hasta llegar arriba y comienza otra bajada larga, muy larga, de
unos 13 km. La primera parte, unos 5 km,
vuelve a ser como las anteriores, aunque no tan técnica, si muy
divertida, corriendo entre los árboles, sorteándolos, evitando raíces, también
con agua y piedras en algunos tramos, hasta que se llega a una pista y poco
después al segundo control, donde está Pepe (voluntario de Burgos).
Me dice que
la bajada es lo que veo, y lo que veo no me hace mucha gracia. Una pista ancha,
terreno duro, bajando (con mi temor de la tibia), además también cogemos varios
kilómetros de asfalto, uuffff, me lo
tomaré con calma. Menos mal que cuando iba por la carretera nos desvían a la
izquierda y nos meten por unos campos de arroz. Es divertido correr por las
estrechas sendas que dividen los pequeños campos de arroz. Después de los campos de arroz cruzamos el
río y seguimos su curso hacia arriba. Salimos a la carretera y después de unos minutos corriendo por la carretera
llegamos a meta, con sol y calor.
La meta está a las afueras de la ciudad. Es otra granja. Yo
me esperaba algo similar a lo de la tercera etapa, pero no, esta vez estaba
mucho mejor. Eran cuatro habitaciones
con suelo de madera, pero en una, había una cama. Bueno, alguna ventaja tiene
que tener llegar primeroJJJ,
la cama para mí!!! (intenté compartirla con alguna corredora, pero no llegamos
a un acuerdoLLL).
Muy cerca de la meta, hay un “bar”. Allí nos dirigimos
algunos corredores, y aunque la mayoría pedían cervezas, al final, la bebida
que más triunfó fue el “mango juice”, …imaginaos porqué???
6 JUNIO: 5ª ETAPA:
PARO-GRANJA(2280m)-DRUKYAL DZONG(2580m):52,7km. (+1375, -1070)
Hoy era la etapa más larga de la carrera. Se hicieron dos
salidas. Un grupo salió a las 6 de la mañana y otro salimos a las 7. Mi intención
era ir despacio, con el grupo de cabeza, pero Jo Petersen, salió como un avión,
es muy buen rodador (como siempre lo hace, aunque luego casi siempre se queda,
pero siempre lo hace así. Además sus piernas miden tanto como yo). Vamos por
una pista por la margen izquierda de un río durante 5 km, luego cruzamos un
puente y volvemos otros 5 km por la otra margen del río hasta llegar al primer
control. Jo va delante. Pero aquí comienza un terreno más divertido. Ahora son
sendas con subidas cortas, tramos por campos de arroz, más sendas y aquí cazo a
Jo. Salimos a una pista ancha que nos lleva a la carretera por la que bajamos
la etapa de ayer. Ahora hay que subirla, aunque no mucho trozo. De todos modos,
se va con algo de tensión, porque hay pocas marcas y no sabes si vas bien o no,
pero al final acertamos. Nos desvían a la derecha. Por fin dejamos la
carretera, de momento, y volvemos a una pista, que nos vuelve a sacar a la
carretera, por una subida dura hasta llegar al segundo control. Aquí sí que nos
devuelven a nuestro terreno. Una bajadilla por una senda, que luego transcurre
por un bosque. Pero pronto se acaba lo bueno. Una bajada por una pista nos
lleva de nuevo a… la carretera. Y sorpresa. Aquí me esperan dos policías en una
moto. La carretera transcurre a lo largo de la pista del aeropuerto. La verdad
es que la carretera está de pena. Casi se agradece que sea así. Con tierra por
los lados y llena de baches, muchos baches, incluso hay tramos en los que no
hay asfalto. Llego a la ciudad de Paro y la cruzamos corriendo. Poco después se
gira a la derecha, se cruza un puente
y…se acaba el asfalto. Comienza una pista de tierra, picando
ligeramente hacia arriba. La policía sigue conmigo. Volvemos a la ciudad de
Paro, por la otra vertiente. Vamos por la orilla del río, por una pista llana e
interminable hasta que se llega a un puente tibetano que hay que cruzar. Aquí
está el cuarto control. Quedan los últimos kilómetros. Una primera subida dura,
para luego ir por una pista que finalmente se convierte en “carretera”.
Y la poli me sigue acompañando. Durante el
trayecto veo algo que me impresiona. Mucha gente trabajando en la carretera.
Familias con niños incluidos picando piedra. Quizás esto trastoca un poco el
concepto con el que venía a este país, llamado el País de la Felicidad. Pero
hay que seguir corriendo. La carretera es en continua subida. Tengo que
refrescar mi cabeza con el agua de los arroyos que bajan de la ladera de la
montaña. Y llegamos a un pequeño pueblo, muy cerca de la meta, porque hay que
subir por una empinada senda empedrada hasta una especie de fortificación, como
aquí los castillos. Un lugar excepcional y maravilloso. Para mi sorpresa el
segundo en llegar hoy es Jo, aunque quizás no tanto, pues este terreno se le da
bien. Bajamos andando hasta el pueblo donde han ubicado las tiendas para
dormir.
7 JUNIO: 6ªETAPA: DRUKYAL
DZONG(2582m)-NIDO DEL TIGRE: 14,6km: (+1205,-691)
Hoy es la última etapa. La más corta. La que se supone que
es de relax (hasta que deja de serlo). Se hacen tres grupos. El primero sale a
las 5, el segundo a las 6 y el tercero salimos a las 7 de la mañana. En nuestro
grupo decidimos ir todos juntos. Vamos por una pista con subidas y bajadas.
Luego entramos en una preciosa senda enmarcada en lo alto de un río, con una
caída para abajo cojonuda. Atravesamos también los típicos campos de arroz,
luego por un canal de agua y llegamos a la carretera. Y comienza la subida.
Unos 6 km de subida. Tras un kilómetro, más o menos subiendo, llegamos al
primer y único control, donde se acaba la carretera. Nos hacemos todos una foto
y………marica el último. A Manu parece que le persigue el diablo (con lo buenín
que soy yoJJJ),
cómo sube el jodío… La verdad es que la subida es una chulada. Dura, pero
bonita. Pero es que lo mejor nos está reservado para el final. Cuando te queda
menos de un kilómetro para meta, lo que más te apetece es pararte, quedarte con
la boca abierta y flipar en colores. ¿A quién cojones se le ocurrió hacer algo
así aquí?
Un monasterio colgando sobre un acantilado con casi mil metros de
caída para abajo y otros tantos para arriba.
Una cascada de agua espectacular
cien metros antes. Y para llegar una senda con escaleras de piedra en zigzag y
en continuo sube y baja. Y ahí estaba la meta. Y aquí acaba esta carrera, esta
maravillosa, preciosa, alucinante y genial carrera.
Luego bajamos andando hasta un cercano restaurante para
comer, hacer la foto todos juntos y regresar a Paro, para alojarnos en un hotel
de esos que te quitan el hipo. Allí nos hicieron una representación del
folclore tradicional, una cena de gala con el primer ministro (el ministro de
justicia) con el que tuve que sentarme en la mesa y nos ofreció la constitución
de su país de la que se sentía muy orgulloso (porque la había redactado él).
CONCLUSIÓN
Observando en que se está convirtiendo este mundo de las
carreras, contemplo que todavía hay carreras que conservan ese espíritu de buen
rollo, de que el primero vale igual que el último, que todos corremos en las
mismas condiciones, que aquí solo estás tú y los demás corredores. Y si además
mezclas todo eso con una organización genial,
un lugar de ensueño, una carrera dura, un intercambio cultural, un trato
personal inolvidable, joder sólo falta…. Mejor me lo callo.
CLASIFICACION
1º Salvador Calvo: 22h 18’ 1ª
Sophie Power: 31h 49’
2º Manu
Pastor: 24h 00’ 1ª Zenia Inselmann: 31h 49’
3º Stephan
Sigron: 24h 35’ 3ª Charla
Heimer: 34h 12’
Enhorabuena Salva y a seguir disfrutando. Espero que la -itis haya desinflamado y todo este normal ya que en Andorra con tanta nieve se os va a hacer difícil aunque han modificado el recorrido.
ResponderEliminarUn placer haber compartido aventuras en Butan, espero que pronto volvamos a coincidir, un abrazo
ResponderEliminarFascinante, Salva.
ResponderEliminarPor cierto, no se me ocurre qué es eso que echas en falta en la última frase, qué será, será....no caigo :) :)
Enhorabuena, toda una aventura en un país increíble...y creo que intuímos que es lo que falta, una cosa que no hay en Buthán...¡un buen helado de cuatro bolas!
ResponderEliminarSalva, eres genial.
Un abrazo y suerte en Andorra
Lluis y Verónica
Conociendo algo la zona me parece increíble correr esa distancia por esos lares. Felicidades
ResponderEliminarhttp://carreras-jorgelenitos.blogspot.com.es/2013/01/blog-post.html